- Enfermedad leve: fiebre, tos seca, odinofagia, congestión nasal, malestar, cefalea, mialgias.
- Enfermedad moderada: síntomas respiratorios y neumonía.
- Enfermedad grave: Disnea, frecuencia respiratoria ≥ 30/min, SatO2≤ 93%, infiltrados pulmonares que progresan en 24-48 horas (esto ocurre en 14% casos)
- Enfermedad crítica: Insuficiencia respiratoria que requiere ventilación mecánica, shock séptico, fallo multiorgánico (5%)